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La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) han presentado el segundo documento estratégico de su alianza tripartita reafirmando su compromiso de brindar un liderazgo colaborativo y multisectorial frente a los actuales desafíos sanitarios. Se extenderá el ámbito de su colaboración con el fin de ampliar el enfoque “Una sola salud”, reconociendo la interconexión entre la salud humana, la sanidad animal y el medio ambiente.

La FAO, la OIE y la OMS han trabajado juntas durante años para enfrentar los riesgos que representa la interfaz hombre-animal-ecosistemas. Su colaboración se estableció formalmente en la nota conceptual tripartita FAO/OIE/OMS de 2010 y, en múltiples oportunidades, las tres organizaciones han demostrado que reuniendo sus conocimientos, enfoques y capacidades técnicas en materia de salud humana y sanidad animal, alimentación y agricultura pueden generar sinergias sólidas, que producen soluciones duraderas, eficaces y rentables a los complejos problemas del mundo de hoy.

Desde 2010, los socios de la alianza tripartita concentran sus esfuerzos en tres temas técnicos principales: la resistencia a los agentes antimicrobianos, la rabia y las influenzas zoonóticas, tres áreas de trabajo representativas de la importancia de la colaboración multisectorial para una gestión del riesgo eficaz.

Los logros alcanzados son hoy visibles. Por ejemplo, el Plan de Acción Mundial de la OMS contra la resistencia antimicrobiana se desarrolló en estrecha colaboración con la FAO y la OIE y los Países Miembros de las tres organizaciones se han comprometido a implementarlo a escala nacional. En 2015, los países adoptaron un marco mundial para la eliminación de la rabia humana transmitida por los perros y han fijado el objetivo de reducir el número de muertes humanas a cero en el año 2030. Por último, los socios de la tripartita han trabajado de la mano durante más de una década en las influenzas zoonóticas, en particular gracias a la red OFFLU, en una mejora en la vigilancia mundial y en el intercambio de información con los expertos de la OMS para adaptar las vacunas de la gripe a las cepas animales actualmente en circulación.

En paralelo, en respuesta a los eventos mundiales, las organizaciones también han estado trabajando en algunos temas que requieren un liderazgo multisectorial tales como la tuberculosis zoonótica, el síndrome respiratorio por coronavirus de Oriente Medio (MERS CoV), y en herramientas y actividades de refuerzo de competencias destinadas a reforzar la cooperación entre los sistemas de salud humana y sanidad animal y aunar esfuerzos para desarrollar capacidades dentro de los servicios de salud.

Con base en estos éxitos, los socios han decidido ampliar recientemente su colaboración.

El documento “Compromiso tripartita: aportar un liderazgo multisectorial y colaborativo en los desafíos sanitarios. Octubre de 2017” presenta el camino a seguir por las tres organizaciones para afrontar los desafíos del futuro. Manteniendo la dinámica lograda en materia de resistencia antimicrobiana, rabia e influenzas zoonóticas, los socios han decidido ampliar su colaboración centrándose de manera particular en:

•  el refuerzo de los servicios nacionales de salud humana, sanidad animal e inocuidad de los alimentos;

• la consolidación y modernización de los sistemas de alerta temprana y vigilancia/seguimiento;

• la anticipación, preparación y respuesta a enfermedades infecciosas emergentes, reemergentes y desatendidas;

• el fomento y promoción de la investigación y el desarrollo coordinados con miras a alcanzar una comprensión común de las enfermedades zoonóticas de alta prioridad;

• los retos que representa la inocuidad alimentaria que exigen un acercamiento multisectorial en el contexto del fortalecimiento de la seguridad alimentaria.
   

Este ambicioso programa estará respaldado por la secretaría de la Alianza Tripartita con vistas a impulsar una coordinación efectiva y eficiente en los esfuerzos en cada una de las áreas estratégicas prioritarias a través de una planificación, supervisión e información conjuntas. De este modo, la Alianza Tripartita busca maximizar los programas de trabajo colaborativos en todas las actividades antes citadas. Se promoverán las asociaciones con otras partes interesadas del sector de la salud, al igual que la participación en el plano comunitario, la concientización del público y la comunicación del riesgo.

Mediante este nuevo documento de la estrategia tripartita, la FAO, la OIE y la OMS renuevan su compromiso de desarrollar e implementar enfoques multisectoriales para enfrentar los complejos retos de salud en la interfaz hombre-animal-ecosistemas. Por medio de su liderazgo y coordinación a nivel mundial, los socios continuarán alentando y apoyando colaboraciones en las redes regionales, nacionales y locales.

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