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Los humanos podemos acabar con más de un millón de especies

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Un millón de especies están al borde la extinción. Parecen cifras imposibles, pero proceden de un estudio de la agencia intergubernamental IPBES, un comité de Naciones Unidas. El trabajo se titula 'El peligroso declive de la naturaleza sin precedentes', elaborado por un total de 145 expertos de más de 50 países. Han llegado a la conclusión meridianamente clara: la extinción de especies no hace más que acelerar.

Se calcula que en todo el planeta hay ocho millones de especies distintas. Según este documento, más del diez por ciento podrían perderse en los próximos años por un solo problema. Y no es otro que la acción de los seres humanos. Los científicos han elaborado un informe que tiñe de negro el futuro de la naturaleza: se extinguirá un millón de especies por culpa del crecimiento constante de la población y su consumo insaciable.

Las causas directas hablan de los efectos del cambio climático y de la explotación sin control de los recursos naturales, aunque también se achaca a la contaminación y al tráfico de animales. El informe señala que están amenazados el 40 por ciento de los anfibios, uno de cada tres arrecifes de coral y más del 33 por ciento de los mamíferos marinos.

Crecimiento incontrolado

No es el primer aviso catastrófico del futuro que espera a los habitantes del planeta. Otro estudio de Naciones Unidas sobre el cambio climático alertaba hace escasamente seis meses de que el mundo tiene apenas 12 años, hasta 2030, para evitar las consecuencias de la variación de las temperaturas. Después, no habrá vuelta atrás.

Un millón de especies está en peligro de extinción por culpa humana.

El último informe de la ONU explica los problemas que conlleva el crecimiento incontrolado de la población: se ha duplicado pasando de 3.700 a 7.600 millones de personas en apenas 50 años. Pero no sólo eso: el producto interior bruto por persona es, ahora, cuatro veces mayor. Sin embargo, los recursos naturales siguen siendo los mismos.

Uno de los mayores problemas es que más de un tercio de terrano disponible del planeta y el 75% de los suministros de agua dulce se usan para la producción agrícola o ganadera. Sandra Díaz, coautora del informe y profesora de ecología en la Universidad de Córdoba, explica a la CNN que "necesitamos actuar como administradores de la vida en la Tierra. Queda muy poco del planeta que no haya sido alterado significativamente por los humanos".

Se extinguirá un millón de especies por culpa del crecimiento constante de la población y su consumo insaciable

La buena noticia es que aún hay tiempo para dar la vuelta a la situación. Al menos así lo ve Robert Watson, presidente de IPBES: “No es demasiado tarde, pero solo si comenzamos ahora y trabajamos en todos los niveles, desde el local hasta el global". Algo a lo que Sandra Díaz remacha que los gobiernos “deberían implementar cambios drásticos ahora para evitar un futuro terrible en menos de 20 años, cuando la seguridad alimentaria y climática esté en peligro".